“El Wii es la nueva consola de ahora”
Estaba en la pradera, con Jacob a mi lado, dándonos de comer frutitas. No se por qué, pero no me molestaba el sabor. Sabía bien, dulce como la sangre humana pero con un no-se-qué que lo hacía más adictivo.
Toc, toc, toc.
Ese sonido interrumpió en la pradera, mire a Jacob y el seguía dándome de comer, como si no se escuchara ese sonido. Lo intente olvidar, diciéndome a mi misma que estaba loca, además el sonido no era tan desagradable, era leve y suave.
Toc, toc, toc.
El sonido se intensifico y mire a Jacob asustada, el me frunció el ceño y movió ligeramente la cabeza a un lado, preguntándome en silencio que pasaba. Intente contestarle, pero la voz no salía de mi garganta. Jake río a mi lado y después me dio otra uva.
Toc, toc, toc.
Ya no era un suave toqueteo, era ruidoso como una maquina de construcción en plena vía pública, intente gritar pero no encontraba mi voz. Jake se paro y se alejo de mí, caminando hacia el bosque. Lo llame, una y otra vez pero no producía ningún sonido.
Toc, toc, toc.
- ¡Noo! –grite, y levante mi dorso de la cama. Vi a papa en la puerta con los nudillos en esta, tocando, y en menos de un segundo ya estaba aun lado de mi asustado –debió haber estar viendo mis sueños- y mama aun lado de mi, con su mano fría en mi frente. Hannah estaba aun lado de mi, dormida con un brazo en mi cintura. Fruncí el ceño y mama río.
- Son como dos pequeñas hermanitas –dijo, y me dio un beso en la frente.
- Solamente que Hannah es cincuenta grados más caliente que una hermana normal –murmure y quite su brazo sobre mí. Ella murmuro no-se-que y se dio vuelta inquieta.
- ¿estas bien? –pregunto papa, aun preocupado por mi pesadilla.
- Si, si lo estoy papi, -dije y pensé: “viejo sobre protector”. El me gruño y después me acerque a darle un beso en la mejilla. Entonces recordé, que mis padres habían venido a despertarme, así que pregunte con el ceño fruncido- ¿Por qué me despertaron?
- Querida, son las dos y media de la tarde –regaño mi madre y mi quijada cayo ¿dos de la tarde?
- ¡Hannah! ¡Hannah! ¡Despierta! –la revoloteé y ella me golpeo el brazo con su gran manota.
- Déjame… -dijo y después ronco suavemente.
- Hannah… ¡son las dos de la tarde! –grite.
- ¿y quieres que te compre un bosque? ¿O que?* –contesto y yo empecé a reí.
- No, quiero que te despiertes –la sacudí mas- ¡ahora!
Hannah abrió los ojos lentamente y cuando vio a mis padres mirándola fijamente grito. Después empezó a reír nerviosamente y yo le di un golpe juguetón en el brazo.
- ¿Por qué despiertas tan tarde niñas? ¿Se desvelaron? –pregunto mi madre con una sonrisa.
- Estem… si –murmure y desvíe los ojos hacia el edredón, rápidamente cambie de pensamientos, por que ya estaban recordando la noche anterior, y las travesuras…
“Creo que quiero un perrito, todos tienen uno. Me pregunto que dirían mis padres si yo les pidiera uno…”
- No –respondió mi papa a mis preguntas silenciosas.
- ¿no que? –me hice la inocente.
- No puedes tener un perrito Nessie, Emmett se lo comería
- ¡mama, mi papi esta entrando en mi mente otra vez! –hice un puchero y Hannah río. Oculte mi cara en el frío y duro pecho de mi madre y “solloce”
- Edward…ya hemos hablado de esto –lo reprendió- vamos cielo, el ya no –remarco ese no, y miro asesinamente a mi padre- entrara en tu mente, ¿esta bien? ¿Quieren algo de desayuno?
- O comida –corrigió mi padre, con una sonrisa torcida en su rostro.
- ¡si! –dijimos al mismo tiempo mi amiga y yo. Reímos y después, bajamos a comer.
- ¿tienes todo? –pregunto Hannah. Empecé a revisar mi mochila con los objetos de espionaje.
- Si: linterna, libreta de apuntes, radios, lentes de visión nocturna… ¿sándwiches? ¡Que asco! ¿¡Por que hay eso en mi mochila!?
- Pues… -miro al piso y sus mejillas se sonrojaron- puede que me de un poco de hambre…
- Bueno, repasemos el plan… -intente cambiar de tema, y funciono, que suerte que Hannah es mas despistada que un maní (¿?)
- Mira, será exactamente lo mismo que ayer. Por suerte toda la familia salio, Alice y… Jasper –río al mencionar este último, supongo que recordando la noche de ayer- ellos fueron a no-se-donde, tus abuelos están en el hospital, y tus padres…
- Cabaña si esta bien, pero Rose y Emmett son los sexo-patas de la familia ¿lo olvidad? ¿Qué tal si se ponen a hacer cosas?
- Pues nos quedaremos en el armario hasta que terminen.
- ¿Hannah?
- ¿Si?
- Te toca quedarte de guardia esta noche
Estábamos dentro del armario de Emmett, que estaba frente a la pantalla gigante y la cama. En momentos como estos deseé que este armario fuera por lo menos una octava parte del de Alice, pero este era tan pequeño que Hannah tenia que estar aun lado de mí. Estaba muy bochornoso, mi mejor amiga es demasiado caliente, así que no era un buen lugar.
- Estoy nerviosa… -susurro mi mejor amiga y yo rodé los ojos. ¿No se supone que la idea de espiar a la familia era su idea?
- Esta fue tu idea, así que aguántate –dije, y después escucho unos pasos- escucha, se están acercando…
Pasos, mas pasos y después se escucho como giraban la perilla. Hannah se tenso a mi lado y yo volví a rodar los ojos. En un rápido movimiento se azotó la puerta. Me acerque a la puerta del armario y espere.
- No hay nadie en casa… -dijo la voz de Rose con un tono seductor.
- Oh, lo se –respondió mi tío con voz de impaciente.
- ¿Sabes lo que eso significa?
- ¿Jueguitos?
- ¡Si! –casi-grito Rosalie, y en su voz pude notar emoción, mucha emoción.
- Pero Rose, mi amor, siempre son los mismos juegos, ahora hay que jugar algo diferente… -susurro sensualmente el. ¡Por dios! ¡¿Estoy pensando que la voz de Emmett es sensual!?
Hannah interrumpió mis pensamientos, tocando mi hombro. La volteé a ver y en sus ojos vi las suplicas de que nos valláramos. Toque su cara, y le dije silenciosamente que todo esto fue su idea que se aguante, otra vez.
Yo no tenía mas ganas de quedarme aquí, sabiendo lo que pasaría. No por algo Emmett y Rosalie son los sexo-patas de la familia, ellos tienen ese titulo por lo que hacen y se encargan cada noche de defenderlo con uñas y dientes (literalmente).
- ¿Qué te parece este juego? –sugirió Emmett.
- ¡Owh si! Osito tu sabes lo que me gusta –respondió Rose ¿gimiendo?
Ahora la cara de Hannah era de pánico, y podría apostar que la Mia también.
- ¿No importa que sea viejo? –pregunto el.
- No, no es viejo, es un clásico –dijo mi tía con voz de alegría y emoción en la voz. Yo simplemente ya no quería escuchar mas. Pero como si el mundo estuviera en mi contra, empezaron a mover cosas y a reírse más fuerte, y después Rosalie dijo algo que llevo mis pensamientos a un mal camino:
- ¡Pido ir arriba!
- ¿Qué? ¡No! yo quiero ir arriba, tu fuiste arriba la ultima vez –hico un puchero el.
- No, yo te gane, así que dámelo ya –uso su voz amenazadora y exigente.
- Esta bien…
Pasaron algunos minutos y se escucho como prendían una televisión. No quise imaginarme para que la ocuparían, realmente no me quería imaginar nada, solamente quería salir de ahí y ver Discovery Kids* y dejar de pensar obscenidades, por que eso es lo que estaba pensando. De nuevo agradecí que mi padre no estuviera aquí, y que su poder no llegara tan lejos.
- ¡Oh si! –gimió ella.
- ¿tan rápido? –se quejo el- dos de tres rondas…
- Las que quieras…
Y Hannah ya no resistió más: se aproximo a la puerta –como si el armario fuera tan grande, de hecho se movió como cinco centímetros- y la abrió ligeramente. Yo no quería observar lo que mis tíos pervertidos estaban haciendo, pero mi mejor amiga niña-loba tenia un concepto muy diferente al mío, así que se asomo, y la curiosidad me gano…
Frente a la gran pantalla, estaban los dos sentados, dándonos la espalda. Cada uno tenía un control de GameCube* y estaban jugando al Mario Kard*.
Entonces comprendí a lo que se referían: cuando dijeron que quien arriba, se referían a arriba de la pantalla; cuando dijeron lo de las rondas, se referían a las carreras del juego; “juegos clásicos” se referían a juegos clásicos, como Mario Kard.
- ¡Ja! Te volví a ganar –dijo mi tía mientras se paraba y hacia un baile extraño de la victoria.
- Otra ronda… -refunfuño Emmett, y después hizo un puchero.
Suspire de alivio y Hannah también, cerramos las puertas de nuevo y me deje caer a un lado, cerrando los ojos, intentando olvidar todo.
- ¿Nessie? –murmuro en un susurro mi amiga lincantropa.
- ¿mmh?
- Tu familia me da miedo
- No más que a mi Hannah, no más que a mí
* Broma privada, ¡tenia que poner esa frase! Si quieren explicación, pregunten en un review, si no, ignórenme por completo :)
* Canal infantil.
* Consola de video juego.
* Juego de carreras del Mario.
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